Hola
Pleno Julio. En esta tierra unos días hace un calor que se ahogan hasta las moscas y otros días llueve o entra la galerna y la humedad ambiental sube de tal manera que parece que estamos en el trópico. Son los típicos días bochornosos que no hay humano que aguante.
Los bonsáis notan estos cambios. La transpiración por las hojas va íntimamente ligada a la temperatura y a la humedad relativa. Si consumen mucho agua por las hojas necesitan mas riego por las raíces. Es la forma de que el equilibrio hídrico entre la parte enterrada que absorbe agua y la parte aérea que la consume sea perfecto.
Para regar bien, es importante administrar agua únicamente cuando el árbol lo necesita.
La forma de administrar el agua dependerá del tipo de sustrato que lleve nuestro bonsai.
.- Árbol tropical de los que frecuentemente se meten en“ el interior” , en su mayoría árbol comercial con sustratos muy compactos . Cuando se secan en exceso se contraen y no hay manera de que el agua penetre en el interior del cepellón. En estos casos es aconsejable regar por inmersión sumergiendo la maceta en un cuenco con agua sin que el agua rebase el alto de la maceta. Se mantendrán en agua durante 20 o 25mn. Hasta que todo el sustrato este bien empapado. Dejar escurrir y colocar en su sitio habitual.
.- Bonsai con sustratos sueltos y drenantes, tipo akadama, pomice….que cambian de color cuando necesitan riego. Deben regarse por encima de la superficie del sustrato con una botella, regadera o lanza de riego. La duración del riego dependerá. En general regaremos hasta que el agua sobrante comience a caer por los agujeros de drenaje.
Regar las hojas dependerá en gran medida de la especie y sobre todo de la hora del día y de la humedad relativa. Si el día es seco, al regar por encima, las hojas se secaran deprisa y no se chamuscaran. Si la humedad relativa es alta y sale el sol, las hojas mojadas se chamuscan rápidamente.
La calidad del agua no es problema en el norte. Agua maravillosa, blanda y sin apenas cal. El cloro depende del consorcio de aguas.
Utensilios de riego. Después de múltiples pruebas y demás creo que lo que mejor funciona son las regaderas especiales para bonsai y las lanzas de riego que se ponen en la manguera cuando el numero de ejemplares es considerable.
Utensilios de riego. Después de múltiples pruebas y demás creo que lo que mejor funciona son las regaderas especiales para bonsai y las lanzas de riego que se ponen en la manguera cuando el numero de ejemplares es considerable.
No me convence el riego automático ( mismo caudal, misma hora, mismo sitio .). Únicamente si es por un tiempo limitado a saber, vacaciones.. Tampoco me convence el uso de hidrojardineras porque el árbol no distingue si tiene los pies mojados y el sustrato por capilaridad acaba permaneciendo siempre empapado.
Además de todo esto existen artilugios varios como botellas con agujeros…y demás inventos.
Las regaderas de bonsai y las lanzas de riego tienen las rosetas con multitud de agujeritos. Al tener múltiples salidas, el agua tiene que caer con cierta presión, por ello ambos utensilios tienen un brazo mas largo de lo normal. El agua cae suavemente, nada de a chorro, cae haciendo una curvatura que evita que el sustrato se desparrame y ayuda a que la tierra se empape toda por igual.
Las rosetas se pueden desmontar para limpiar. Se hierven y así se eliminan los restos de cal. Colocaremos la roseta de la regadera siempre mirando hacia arriba para que el agua caiga con suavidad.
Estos utensilios permiten regar sin arrastrar el sustrato y a la vez el agua cae como una lluvia finísima perfecta para nuestros bonsáis.
Ahora se fabrican regaderas especiales para bonsai en plástico baratas y perfectas para el riego. Las lanzas que se acoplan a las mangueras pueden llevar llave de paso o no. Yo he utilizado ambas y prefiero sin llave. Con el uso continuado las llaves se suelen agarrotar. Eso si, cuanto mas larga es la lanza mejor.
También he utilizado un acople de riego al final de la manguera para nebulizar los árboles. La nebulización es fantástica para ciertas especies en procesos de formación.
Saludos cordiales
Beti Andrés